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OBSERVATORIO SOBRE LA DESPOBLACIÓN

Freno a la despoblación

Leemos este artículo de opinión que suscribimos por completo; es de Fernando Tascón y lo publica el Crónica de León

 

Ya nos temíamos que alguna mente lúcida de cuantas abundan en la administración no tardaría en hallar la fórmula para acabar con este incómodo fenómeno del siglo XXI que es la despoblación. Nada mejor para terminar con la caída vegetativa y el éxodo constante hacia la ciudad que eliminar los pueblos. Si se erradican los pueblos, con el menor número de víctimas que sea posible, nos encontraremos con que sus habitantes dejarán de disminuir de forma automática. No tenemos ni la menor idea de cuántos sociólogos habrán sido necesarios para tomar esta determinación, pero el método escogido para desarrollarlo no ha sido precisamente sibilino. Comencemos por retirar las escuelas hacia los lugares más alejados que sea posible. Cuando los niños no tengan garantizado el maestro, cuando estén obligados a darse el madrugón invernal para subir al transporte escolar que los lleve sobre hielo hasta el CRA más próximo, habremos logrado gran parte del objetivo: la población sana terminará yéndose. Ocupémonos ahora del segmento vecinal más proclive a la enfermedad y el padecimiento: los mayores. Para perderlos de vista, solo habrá que alejar de su presencia a los médicos y su séquito de enfermeros. Si lo logramos, si nos cargamos el consultorio y obligamos a los ancianos a desplazarse a otro pueblo para conseguir las pastillas, estaremos en el camino más apropiado para que se cierren definitivamente todas las puertas del pueblo. Por si a alguno de los estrategas de este plan no se les había ocurrido, un perfecto acelerante para el desánimo general podrían ser las restricciones en calefacción en colegios y centros de salud.
En fin, la idílica existencia que atribuimos a nuestros pueblos, ese locus amoenus que anhelamos como destino para el tiempo de retiro no es tal cosa: solo se trata de un territorio para prejubilados mineros, con hijos universitarios y con un todoterreno para salir a escape cuando llega la nieve.

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