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OBSERVATORIO SOBRE LA DESPOBLACIÓN

Políticas contra la despoblación

La aldea inglesa de Valdelavilla en Soria cumple 10 años

Leemos en EL NORTE DE CASTILLA la siguiente noticia:
La despoblación puede convertirse en una oportunidad de negocio, y aún más en la provincia más despoblada de Europa como es Soria. Valdelavilla es un pueblo de la serranía de Tierras Altas de Soria. Abandonado y despoblado desde los años 60 del pasado siglo fue restaurado de la mano de Soria Tierras Altas, S.A., participada por Caja Rural de Soria y convertido en un moderno alojamiento de Turismo Rural, que ha servido para ayudar a dinamizar la zona donde se encuentra ubicado. Son doce las personas que trabajan y viven en la localidad durante el año, residen en el complejo hotelero reconstruido con un estilo antiguo y recuperando la escuela, el granero o la casa del maestro entre otros edificios.
Desde hace diez años, Valdelavilla abre sus puertas todos los fines de semana del año para disfrutar del sabor de los pueblos castellanos y de la tranquilidad que conlleva el contacto con la naturaleza, al margen de cualquier cobertura de telefonía. Valdelavilla entre semana se convierte en el más prestigioso de los VaughanTown, aldeas inglesas donde se realizan cursos de inmersión lingüística.
Fue en julio de 2001 cuando el prestigioso profesor de inglés Richard Vaughan inauguró este proyecto, el primero de estas características en España y también innovador en el mundo. Un lugar donde el español está prohibido y donde solo se puede hablar inglés. Gracias a este sistema de enseñanza de Vaughan Systems, por Valdelavilla han pasado en estos últimos años más de 5.000 alumnos y más de 2.000 angloparlantes de diversas nacionalidades, entre ellas ingleses, estadounidenses, coreanos, australianos, indios o canadienses.
En palabras de Richard Vaughan, «Valdelavilla fue nuestro primer enclave para enseñar inglés gracias a nuestro sistema de inmersión lingüística y después de estos diez años sigue siendo uno de los lugares más solicitados por nuestros alumnos gracias a su ubicación en plena naturaleza y su aislamiento que permiten a los alumnos que durante su estancia se olviden del español y solo hablen inglés».
Manuel Pérez es uno de los gerentes del complejo y garantiza que «en cinco días los alumnos despiertan el idioma de una forma asombrosa porque es necesario poseer un mínimo nivel de inglés y a partir de ahí, y tras pasar una prueba de nivel, cada uno trabaja en su grupo». La ventaja de los cursos intensivos es que cada matriculado habla una hora con un voluntario diferente y así «puedes estar hablando una hora con un bombero de Wisconsin, a la hora siguiente con un ganadero de Nueva Zelanda y después con una periodista de Londres». Más de 2.000 voluntarios anglosajones han pasado por Valdelavilla en los diez años de funcionamiento buscando también la tranquilidad absoluta y el retiro a la naturaleza.
No solo grupos organizados por empresas sino también cualquier particular puede matricularse entre marzo y octubre a cualquiera de los cursos que se ofrecen para «practicar y practicar, también entre los españoles hablamos en inglés y si no tenemos una pequeña sanción» ríe Manuel Pérez.
Richard Vaughan anima a los españoles a «que se lancen a la piscina y cojan oído, y que pierdan la vergüenza típica española a hablar inglés y a hacer el ridículo». Insiste en que los españoles estamos más que concienciados de la importancia de hablar inglés, en los diferentes campos profesionales, «lo que ocurre es que muchos no son capaces».
Richard Vaughan es, además de un afamado profesor de inglés, un fuerte empresario que cuenta con un canal de televisión, una emisora de radio, un sitio en Internet además de cientos de instalaciones dedicadas a la enseñanza en todo el mundo. Sin embargo es su técnica didáctica de enseñanza del idioma lo que le ha hecho famoso. 

Un proyecto trata de recuperar los árboles frutales adaptados al clima de la provincia de León

Leemos en ECONOTICIAS la siguiente información:

El severo clima de la provincia de León, con heladas en invierno y veranos cortos e intensos, ha endurecido los árboles frutales que se han plantado en zonas rurales. La progresiva despoblación del mundo rural ha afectado a estos árboles, abandonándose en muchos casos su cuidado. Por cuestiones de preservación de esta diversidad genética, la Fundación +Árboles ha comenzado un proyecto para plantar un bosque de árboles frutales con esguejes de ejemplares autóctonos. Los promotores de la iniciativa negocian actualmente la cesión de terrenos comunales con ayuntamientos en el entorno del río Curueña, para comenzar la plantación en junio.

La iniciativa comenzó en la presentación de la Fundación +Árboles en octubre. A aquella reunión acudieron asociaciones y sindicatos agrarios y forestales. Entonces se plantearon cuestiones en torno a la diversidad genética de las plantaciones de la provincia. Entre las ideas, surgió la creación de un bosque de especies frutales autóctonas de la provincia de León, que los promotores afirman que se hallan en peligro de extinción. "Existen perales que resisten en zonas de montaña las heladas, y que ahora, por la despoblación del mundo rural, se están viendo abandonados, por lo que su herencia genética se perderá", relata a DiCYT Carlos Alfaro, de la Fundación +Árboles.

 

Esta idea se empezó a materializar a primeros de enero de 2011, en una nueva reunión del grupo de octubre en la que se repartieron tareas para la creación de ese futuro bosque de frutales autóctonos: un socio, Matías Llorente, buscaría un terreno público de una o dos hectáreas y el resto de asistentes se organizaría en equipos para hacer un trabajo de campo en pueblos, buscar los árboles y obtener datos de su origen y al menos cuatro varas de cada uno a fin de plantar en macetas o injertar. En estos momentos, el grupo tiene unas 200 varas plantadas echando hojas en una finca en la ribera del río Bernesga. Hay recogidas muestras de guindos, cerezos, manzanos, perales y membrilleros.

 

Dado que la época para recoger varas terminó en marzo, ya que en primavera los árboles comienzan a brotar, se planteó la necesidad de improvisar una primera fase, a fin de no perder el año. La segunda fase, más sosegada, sería el momento de redactar un proyecto (tratando de recuperar no sólo la realidad física de los árboles sino también su identidad, incluyendo su genoma y su memoria histórica) y planificar las posteriores intervenciones. En estos momentos, los promotores están buscando un terreno para ubicar su bosque, con el fin de comenzar la plantación de los esguejes en junio. El proyecto se plantea para que los frutales sean cuidados por mayores de la localidad donde se ubique, como forma de ocio para este colectivo y para contribuir a la mejora de su estado físico.

Recogida de varas en marzo

La recogida de varas se realizó por pueblos de la ribera del Esla, La Aldea del Puente, Quintana de Rueda, Villahibiera, Fuentes de Peñacorada y caseríos aislados. El grupo recolector se adentró incluso en el monte y tomó varas de árboles salvajes, cuidando de que las zonas no estuvieran contaminadas por el fuego bacteriano. Los campesinos de la zona ayudaron a diferenciar las especies autóctonas de las que no lo eran, mostraron árboles centenarios, ayudaron para el acceso a huertos abandonados en los que los árboles sobrevivían con dificultades. En esa fase se recogieron unas 180 varas pertenecientes a medio centenar de árboles.

En la actualidad, los árboles están evolucionando con normalidad, informa Alfaro, "en ellos han brotado hojas y se perfilan como futuros ejemplares que producirán las frutas" que los responsables del proyeto califican como "de toda la vida”. El equipo también se ha propuesto fotografiar el florecimiento de los ejemplares de procedencia, con el fin de conocer la evolución de los mismos.

Aunque en un principio se planteó la idea de recoger el ADN de los ejemplares de los que se tomaron las varas, los promotores de la iniciativa no realizarán esta actividad "por el momento" debido a su coste. Todo el proyecto se realiza con recursos económicos propios. En una segunda fase, en 2012, se pretende ampliar el bosque con 200 ejemplares más. Paralelamente, uno de los participantes, el botánico y naturalista Manuel Durruti, ha planteado la creación de un parque de bosques temáticos que llevará el nombre de Botanicum Europa.

http://www.dicyt.com/

Opinión

Dejamos aquí la opinión que nos hace llegar a través del comentario a uno de nuestros post, un amigo de Mosqueruela. Nos parece muy interesante lo que dice, así que ahí va:

 

Juan J

Me llamo Juan, nací y me crié en un pueblo de la Sierra de Gúdar, Mosqueruela 265 km2 para 600 habitantes; no llega a 3 habitantes por km2. Como todos los que salimos a estudiar BUP ya no hemos vuelto. Cuando leo temas de este tipo la verdad es que lo único que se me ocurre es pensar de una manera lógica y sensata, con la cabeza fría y dejando las emociones o los sentimientos que puedan distorsionar el juicio y la reflexión obligada.
Estos proyectos no sirven para nada y voy a intentar explicar el porqué de esta afirmación. 
1- Los que han favorecido la completa despoblación de la España rural han sido los gobiernos. Está claro que era inevitable una despoblación del medio rural; los avances tecnológicos, la modernización de la agricultura y de la ganadería, la falta de mano de obra en las ciudades, provocaron el éxodo a las ciudades. Pero han sido los gobiernos de los últimos 70 años los que no han hecho nada por impedirlo, todo lo contrario, les venía muy bien. Cada familia que emigraba tenía que rehacer su vida, comprar una nueva casa, una nueva hipoteca, eran obreros y mano de obra barata para las fábricas.
2- Las condiciones de vida de las zonas de montaña que además son territorio de frontera en los que las distancias mínimas a la capital de provincia son 100km, son condiciones durísimas. Es normal que si existen zonas en las que se vive mucho mejor la gente se cambie. También sucede al revés, de zonas donde se vive relativamente bien, nadie se va a cambiar para ir a peor.
3- Estas zonas no pueden ser mantenidas con subvenciones, eso está claro. Entonces la única salida es que sean económicamente rentables por si solas. Venimos de una época en la que todo se subvenciona y parece que lo tengamos que arreglar todo así. En esto y con respecto al Estado, pienso igual que los viejos, “no me den subvenciones pero tampoco me jodan”. 
4- Para hacer rentables nuestros pueblos necesitamos que las normas que impone la administración no sean tan rígidas, por ejemplo que dejen matar animales en nuestros mataderos municipales. La administración ha conseguido que los mataderos municipales sean ilegales y se da la contradicción de que en las zonas de producción ganadera, se tiene que trasladar y matar los animales en zonas más próximas a los núcleos urbanos. Un cúmulo de intereses ha ocasionado este modelo estúpido de trasladar animales vivos de las granjas a las ciudades, en lugar de trasladar carne despiazada. O que de una granja de Mosqueruela se lleven a matar los cerdos a 100km y luego el secadero de jamones tenga que comprar esa carne para secar en este matadero que está a 100km, a parte de que el pienso también se compra lejos.
5- A la administración le interesa que entre el agricultor o el ganadero y el comprador final, hay muchos intermediarios. Esto es lo que provoca la bajada de precios en origen, tanto que han hecho que ya nada sea rentable. Pero la administración es cómplice de esta situación; más veces cobra el IVA; más veces cobra el IRPF: agricultor, camionero, matadero, mercado, tienda, comprador; 5 intermediarios con sus correspondientes impuestos.
6- En estas zonas de montaña es un crimen que los niños se vayan a estudiar a los 12 años. 
En fín, muchas cosas, a parte otra, cada vez que se ha reivindicado algo siempre se nos ha dicho lo mismo, los pueblos no son rentables. Pero abría que preguntarse si las administraciones públicas que nos ahogan con impuestos lo són.

 

Activos posibles contra la despoblación

Leemos un interesante editorial en la edición digital de LA CRONICA DE LEÓN, a propósito de las opciones de futuro que surgen en una provincia que ha padecido los devastadores efectos de la despoblación:

La mayoría de las comarcas leonesas sufrieron durante décadas el fenómeno de la emigración. Muchos jóvenes abandonaron sus pueblos camino de las fábricas de Madrid, el País Vasco o Cataluña. Las consecuencias se sufren hoy más que nunca en muchos pueblos que están a punto de desaparecer por el envejecimiento de su población y el debate sobre la supresión de municipios ha trascendido ya los límites provinciales y regionales para convertirse en un tema de estudio por parte de los líderes de los grandes partidos. Este periódico publica hoy dos historias para, al menos, mantener la esperanza. La primera, el auge del Camino de Santiago en un pueblo como El Burgo Ranero, en el sur de León. La segunda, la construcción de un centro de interpretación de la Reserva de la Biosfera de Omaña y Luna en el caserón del siglo XVII en Murias de Paredes. En el primero de los casos, es la constatación de unas recientes declaraciones del presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, cuando señaló que la apuesta de los poderes públicos por la Ruta Jacobea no debe quedarse sólo en su promoción turística, ya que es también una forma de generar actividad económica en zonas que de otra manera tendrían muchas dificultades. Así es en El Burgo, donde en los últimos años se han abierto bares, hoteles y albergues. Si no estuviera en el Camino Francés, su futuro sería el mismo que el de otras localidades próximas. En el caso de Murias de Paredes, Omaña es una zona que mantiene casi intacta su gran riqueza medioambiental. En este caso, la despoblación ha causado estragos. Pese a todo, hoy, al menos, tiene un futuro posible en el horizonte, aunque sea difícil de llevar a la práctica. La despoblación es un grave problema para la provincia leonesa y para el conjunto de Castilla y León hasta el punto de convertirse en la mayor actuación prevista por el Gobierno Herrera, la denominada Agenda de la Población. Pero es un reto que también parte en algunos casos, como en El Burgo Ranero o en Murias de Paredes, de activos que hasta ahora no se han desarrollado lo suficiente. Las épocas de crisis, dicen, son también épocas de oportunidades. El Camino de Santiago vive un momento de gran esplendor por la celebración del Año Santo Jacobeo. Más que un año de recoger, es un año de sembrar para que la mayoría de los peregrinos vuelvan. Aunque la Montaña de León sufra la despoblación, casi toda ella es Reserva de la Biosfera... Pensar en positivo es también una manera de enfrentarse a los problemas.

El Senado apoya una moción para luchar contra la despoblación y defender a la mujer rural

Leemos en Noticias Terra, la siguiente información sobre el Senado. Estamos de enhorabuena, al ser la cámara alta consciente y corresponsable con la situación de la España de interior.

 

La senadora del PP por Segovia Juana Borrego Izquierdo -quien a su vez es presidenta de la Federación Nacional de la Mujer Rural (Femur)- ha destacado durante su intervención que trabajar por la mujer rural es una medida 'estratégica para el conjunto del país' y que el consenso logrado en la Cámara refleja que todos los grupos trabajan 'por una misma causa'.

'En los últimos años ha habido cambios esperanzadores', ha señalado Borrego, entre los que ha resaltado el aumento de mujeres cotitulares de explotaciones agrarias y su permanencia en el sistema educativo hasta edades más avanzadas que en el caso de los hombres.

Sin embargo, ha subrayado, las 'nuevas oportunidades' para estas jóvenes con estudios medios y superiores les surgen 'con frecuencia fuera del medio rural', lo que dificulta que puedan fijar su residencia en el territorio.

Desde el Grupo Socialista, la senadora Esmeralda Iranzo ha defendido que su partido y el Gobierno están 'especialmente sensibilizados' sobre la necesidad de frenar la despoblación, y ha recalcado que sólo se ha introducido 'algún matiz' en la moción, porque los Programas de Desarrollo Rural puestos en marcha en España incluyen ya medidas que ahora se reclaman en el texto.

Iranzo ha recordado la próxima puesta en marcha del Programa de Desarrollo Rural Sostenible (PDRS), norma que representará, en su opinión, 'un impulso para el medio rural, sobre todo en las zonas con más necesidad, garantizando mejores condiciones de vida'.

Ha insistido, además, en que los Presupuestos Generales de 2010 han incluido, por primera vez, una partida específica para luchar contra el despoblamiento en las provincias de Soria, Zamora y Teruel, con el fin de frenar 'una sangría poblacional'.

Desde el Grupo Mixto, el senador Arturo Bagur ha justificado su voto favorable a la moción en que 'el mundo rural necesita el apoyo de todas las administraciones', mientras que desde el Grupo Nacionalista José Manuel Pérez Bouza ha considerado 'positivo' impulsar políticas encaminadas a que los jóvenes se incorporen a la actividad agraria.

La Agenda para la Población y el caso especial de Zamora

Leemos en la edición digital de La Opinión de Zamora, un interesante editorial a cerca de la realidad que vive la provincia.

 

El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, acaba de presentar en las Cortes regionales las líneas fundamentales del proyecto de la «Agenda para la Población», donde se establece un marco de objetivos generales y específicos para el crecimiento del censo de habitantes de la comunidad. A través de 108 actuaciones, que incluirán proyectos de ley, planes, programas y medidas concretas, con un presupuesto inicial de 500 millones de euros, el Gobierno regional pretende favorecer un crecimiento demográfico más vigoroso, equilibrado y sostenido en el tiempo.

El nuevo documento de la Junta que modifica el enfoque y la metodología de la anterior «Estrategia de Lucha contra la Despoblación» ofrece, sobre todo, una visión en positivo y señala un objetivo: incidir en los factores más dinámicos y en la percepción de Castilla y León como un lugar atractivo para vivir. Herrera ya lo hizo en la presentación del proyecto, resaltando el crecimiento de la población regional en la última década, de 2.479.118 habitantes a 2.563.521, como consecuencia de la llegada de inmigrantes. No obstante, el propio presidente reconoció en su intervención que la comunidad «presenta un menor dinamismo demográfico en comparación con la media de España» en los últimos diez años.

En el caso de Zamora, la situación sí que es dramática porque se ha descolgado de la tendencia general de la región y en la última década ha perdido una media de mil habitantes por año, con un censo actual que apenas llega a 193.000. Y lo que es aún peor, según las proyecciones a corto plazo elaboradas por el INE, hasta 2019 perderá más de 14.000 residentes, el 7,45% del total.
En el proyecto de la «Agenda para la Población» lo que se echa en falta es, precisamente, medidas especiales para provincias como Zamora, donde la tendencia demográfica a la baja está muy definida, tanto que ni la llegada de inmigrantes ha conseguido darle un vuelco como ha pasado en la mayoría de provincias de Castilla y León y de España.

La iniciativa del Gobierno regional, que plantea seis objetivos específicos dirigidos a jóvenes, familias, inmigrantes, emigrantes, habitantes de otros territorios españoles y desequilibrios internos, no incide, de manera especial, en un colectivo muy importante para la evolución del medio rural, el sector agrario. De hecho, muchas de las objeciones al documento, han llegado desde las organizaciones profesionales agrarias que cuestionan una propuesta que sólo incluye «buenas intenciones» para el sector, sin medidas concretas, porque entienden que no basta con enunciados a favor de apoyar las inversiones en explotaciones agrarias y alimentarias, la refinanciación de la deuda de las explotaciones familiares o la potenciación de la formación agraria especializada de jóvenes. El campo demanda un plan específico, que se incluya dentro de la «Agenda para la Población». No se entiende un ámbito rural en Castilla y León sin agricultura, una actividad que no hace más que perder activos y desangrarse por las políticas globales y que en esta región resulta imprescindible, como lo ha sido su labor a lo largo de milenios, hasta tal punto de conformar su paisaje y su idiosincrasia.

La «Agenda para la Población» no puede ser un documento cerrado. De hecho el Gobierno regional ya ha adelantado que va a mantener contactos con diversos colectivos para enriquecer las propuestas. Por eso es de esperar que de estos contactos surjan nuevas iniciativas y se concreten otras. Para Zamora resulta trascendental que la Junta reconozca la singularidad de cada provincia y que tome medidas especiales en base a su problemática. El problema de la despoblación no es igual en todo el territorio de la comunidad y por tanto tampoco pueden utilizarse las mismas fórmulas para combatirla. Y en el caso del sector agrario, seguramente quien más está padeciendo las consecuencias de la crisis económica, a lo que se une su debilidad estructural agrandada por la globalización, es necesario un mayor apoyo, con medidas concretas y específicas. El ámbito rural es imprescindible para esta comunidad autónoma y este no se entiende sin agricultores y ganaderos. 

 

 

La provincia acogerá en octubre las Jornadas sobre Despoblación

Leemos en el Diario de Teruel una noticia que pone de manifiesto el trabajo desarrollado desde la provincia en la necesaria lucha contra la Despoblación.

La provincia de Teruel acogerá en octubre las Jornadas Nacionales sobre Despoblación, que organiza la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP). Así lo acordó ayer la Comisión de Diputaciones, Cabildos y Consejos Insulares en la reunión celebrada en Barcelona en el marco de la Cumbre Europea de Gobiernos Locales, a la que asistió el presidente de la Diputación de Teruel, Antonio Arrufat

La Jornadas Nacionales sobre Despoblación serán el foro en el que se analice la situación actual, causas, evolución, ejemplos de buenas prácticas y propuestas de futuro para prevenir y disminuir el proceso de despoblación que desde mediados del siglo XX sufren amplias zonas de la España interior. 

Este encuentro permitirá conocer el trabajo realizado por la institución turolense desde el año 2003 en proyectos e iniciativas que han conseguido el respaldo, incluso, de la Unión Europea. 

El presidente de la Diputación de Teruel y del Grupo de Trabajo sobre Despoblación en la Comisión de Diputaciones Provinciales, Cabildos y Consejos Insulares de la Federación Española de Municipios y Provincias, Antonio Arrufat, mostró su satisfacción por la elección de esta provincia para la celebración de las Jornadas Nacionales. 

“De esta manera vemos reconocido el esfuerzo que los turolenses realizan día a día para frenar el descenso poblacional, al mismo tiempo que nos brindan la oportunidad de buscar nuevos apoyos a la propuesta que desde la institución provincial trasladamos en su día a la FEMP y que finalmente ha quedado incluida en la Libro verde de Cohesión Territorial de la Unión Europea”, señaló Arrufat. Así mismo, subrayó la importancia de aliar a todas las provincias españolas con problemas de despoblación, en un modelo que ofrezca garantías de futuro y que cuente con el respaldo del resto de instituciones locales y nacionales.


Los grupos de trabajo que integran la Comisión debatieron sobre financiación local y han analizado la repercusión en los gobiernos locales de la Ley de autonomía personal y dependencia. Asimismo, se presentó un informe del funcionamiento de la edición electrónica de los boletines oficiales de las provincias, de las redes de carreteras y caminos y de los servicios provinciales de extinción de incendios. 

Finalmente, la reunión de diputaciones, cabildos y consejos sirvió como espacio para reflexionar acerca del Anteproyecto de Ley de modificación de las leyes de contratos del sector público y de procedimientos de contratación para su adaptación a la normativa comunitaria.

El objetivo final de la Cumbre, que forma parte del programa oficial de la Presidencia Española de la Unión Europea, es ofrecer un espacio para el intercambio de ideas entre gobiernos locales de toda Europa, las instituciones europeas y los estados miembros, con el fin de promover propuestas concretas en un contexto de crisis económica, financiera y de la nueva agenda europea.

Por otro lado, el Grupo de Trabajo sobre Despoblación -integrado por las Diputaciones de Teruel, Soria, Zamora y Guadalajara- y el grupo dedicado a la financiación local de los Gobiernos Locales Intermedios -formado por las Diputaciones de Barcelona, Granada y Albacete- trabajarán en la creación de un fondo complementario de lucha contra la despoblación y cual debe de ser la financiación global de las Diputaciones Provinciales.

 

Adir Iberkeltia presenta mañana en Madrid un proyecto de cooperación para poner en valor la Celtiberia histórica

Un proyecto en el ámbito de la Cooperación de los Grupos de Acción Local españoles, que vale la pena conocer por lo original que resulta su propuesta:

En concreto, el acto se llevará a cabo mañana en el Salón de Actos de Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino a partir de las 18.00 horas, según informaron a Europa Press fuentes de la organización.

La Celtiberia es un territorio histórico "bien definido" por la información que proporcionan diferentes escritores clásicos que describieron las tierras del interior de la Península Ibérica. En concreto, la Celtiberia histórica ocupó el Sistema Ibérico central y el margen de las tres cuencas sedimentarias que lo rodean: Ebro, Duero y Tajo.

Esta zona destaca por un patrimonio cultural, arqueológico y artístico "único", a pesar de que "tan sólo se conoce" una parte del mismo, por lo que actualmente su valoración "queda limitada" a una realidad "parcialmente percibida".

Por ello, su puesta en valor implica un "desarrollo de la investigación futura" y una "necesaria coordinación" entre la diferentes instituciones responsables para su conservación y potenciación como ruta cultural.

Desde un punto de vista territorial, la Celtiberia es un espacio compartido por diferentes administraciones ya que se distribuye por las comunidades autónomas de Aragón, La Rioja, Castilla-La Mancha y Castilla y León. En concreto, el territorio abarca las provincias de Guadalajara y Soria y parte de La Rioja, Burgos, Cuenca, Zaragoza y Teruel.

Por todo esto, los organizadores del acto de mañana consideraron que la división política "ha dificultado la realización" de planes conjuntos que permitan "vertebrar este territorio" con la conexión histórica del pasado.

FUSIÓN ENTRE IBEROS Y CELTAS

La Celtiberia es, según sostienen diversos autores, fue un pueblo que resultó de la fusión operada entre los iberos y los celtas en algunas regiones de la Península Ibérica. Los celtíberos fueron, de todos los pueblos célticos peninsulares, los "mejor conocidos" y los que jugaron un papel histórico y cultural "más determinante".

Esta época fue un periodo de gran actividad y con una población "importante" con respecto al resto de España si bien, en la actualidad, "coincide con una de las zonas más deprimidas", desde un punto de vista demográfico.

Por todo ello, dentro de este proyecto interterritorial para poner en valor "un recurso patrimonial endógeno" se creó en 2002 la asociación Adir Iberkeltia. Hasta ahora cuenta con once socios con Adri Jiloca Gallocanta como grupo coordinador. Además, están Tierras del Moncayo y Borja, Calatayud-Aranda, Sierra de Albarracín de Aragón, la Manchuela Conquense, Serranía de Cuenca, Molina-Alto Tajo de Castilla-La Mancha, Norte de Soria, Comarca de Almazán, Tierras Sorianas del Cid de Castilla y León y La Rioja Suroriental.

Las líneas de actuación del proyecto están contempladas bajo tres consignas que giran en torno a una promoción que asegure "llegar al máximo de población". Además, a nivel regional, se pretende elaborar un plan director para diseñar rutas de la Celtiberia además de fomentar la formación de dinamizadores locales, el inventariado de los recursos y su señalización.

El objetivo general es el desarrollo "sostenible" de los territorios del Espacio Iberkeltia mediante la puesta en valor de los recursos del patrimonio de la cultura celtíbera. De este modo, se priorizarán aspectos relacionados con la lucha contra la despoblación. La fecha de inicio del proyecto fue julio de 2005 y cuenta con un presupuesto que supera los dos millones de euros.

Proyecto León

 

Nos hacen llegar una propuesta de un grupo de opinión denominado Proyecto León, que plantea una apuesta en la lucha contra la despoblación, que a continuación mostramos.

La provincia de León tiene una población de 500.200 habitantes (padrón de 1 de enero de 2008). Esta población se distribuye en 211 municipios de forma muy irregular: los 8 mayores de la provincia, de más de 10.000 habitantes, aglutinan el 58,65% de la población (León, Ponferrada, San Andrés, Villaquilambre, Astorga, La Bañeza, Villablino y Bembibre); en términos absolutos 293.376 habitantes. Generalizando, se puede afirmar que los habitantes de estos términos municipales reciben una completa oferta de servicios de sus ayuntamientos.

El 41,35% restante está distribuido en municipios que sólo en tres casos superan los 5.000 habitantes (Valverde de la Virgen, Cacabelos y Fabero). Estos ayuntamientos aún disponen de recursos para ofrecer una calidad de servicios públicos razonable. El resto viven en municipios de menos de 5.000 y en un porcentaje elevado, no superan los 1.000 habitantes: de los 211 actuales, 141 tienen menos de mil habitantes, lo que supone un 66,82% del total. Es sobre todo en este último caso, los inferiores a 1.000 habitantes, en los que el cumplimiento de las obligaciones que la institución tiene con sus administrados es deficiente.

Por añadidura, la población provincial se despliega en un número altísimo de núcleos de población: 1.388. A la vista de los datos se deduce que nuestros municipios están formados por un elevado número de pueblos, con muy pocos habitantes en cada uno de ellos. Esto viene a agravar las dificultades en los ayuntamientos con recursos escasos, que no alcanzan a prestar los servicios mínimos que la ley establece.

Debemos añadir a estos parámetros, que la población de la provincia de León disminuye año tras año. Con datos absolutos, a uno de enero de 1996 había 517.191 habitantes, mientras que a uno de enero de 2008, doce años después, la población se ha reducido en 16.800 personas, presentando 500.200. La línea de tendencia indica que ésta despoblación va a ir en aumento, debida mayoritariamente a la emigración desde los núcleos pequeños a núcleos más grandes (con predominio hacia las ciudades) y también a la  elevada tasa de población envejecida que presenta la provincia.

La emigración es debida, en la mayoría de los casos, a que la población asentada en los núcleos pequeños no dispone de servicios básicos necesarios que les aseguren una calidad de vida óptima. La oferta de puestos de trabajo es reducida cuando no inexistente. En muchos casos no hay expectativa laboral, por lo que el nivel socio-económico de los habitantes se ve seriamente afectado. En consecuencia poco a poco se van trasladando a núcleos más grandes donde tienen resueltos algunos de estos inconvenientes.

En resumen, nos encontramos con dos problemas para garantizar unos mínimos en la calidad de los servicios que reciben los leoneses en buena parte de la provincia:

- La despoblación de ciertos municipios, que reduce o impide la posibilidad de prestar servicios por la escasez de recursos que implica y por la absorción de éstos por los gastos fijos del ayuntamiento (secretario, administrativos, sede municipal, alcalde y concejales, etc.).

- La atomización de la población en pequeñas aldeas que, si un día tuvieron una población reseñable, actualmente se encuentran casi desiertas, lo que impide garantizar los servicios individualizadamente en cada una, como se había hecho hasta ahora.

La única posibilidad que existe para resolver estos problemas es la creación de municipios rurales más grandes en los que los gastos fijos se diluyan entre más habitantes liberando recursos para la prestación de servicios. La agrupación de municipios permite además implantar equipos móviles para llegar a todos los núcleos cuando se demande.

Por otra parte, aquellos ayuntamientos que disponen de una población concentrada en un casco urbano amplio (Sahagún, Valencia de Don Juan, Santa María del Páramo, Villafranca del Bierzo, etc.) pueden racionalizar su administración con más facilidad, prescindiendo en su término incluso de núcleos que por su configuración se adaptarían mejor a otra municipalidad más rural.

Una concentración municipal dará como resultado dos tipos de municipios, con la premisa de que su población no sea inferior a 1.000 habitantes: por un lado los concentrados (o urbanos) y por otro lado los rurales, donde las Juntas Vecinales, esencia de nuestra administración secular, deberán tener un papel más relevante aún del que tienen en la actualidad.

Con esta distribución se conseguirán ayuntamientos equilibrados, unos netamente urbanos y otros de muchos núcleos, más fuertes, con más recursos económicos, con más relevancia ante otras administraciones y con mayor capacidad de interlocución y demanda. Esto se traducirá en un aumento de la calidad de vida de la población y, en consecuencia, en el asentamiento de la misma, evitando de esta forma que nuestros pueblos se queden vacíos.

[Fuente: Instituto Nacional de Estadística. Datos de 2008]

 

El Consejo para el Medio Rural acuerda intensificar en 2009 los proyectos piloto para el desarrollo rural

Leemos una interesante nota de agencias

El Consejo para el Medio Rural acordó hoy intensificar en 2009 las pruebas piloto para el desarrollo rural en España que tienen como fin identificar las medidas a tomar para acabar con las diferencias socioeconómicas existentes entre el ámbito rural y el urbano, informó en un comunicado el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino.

   En la reunión, que estuvo presidida por el secretario de Estado de Medio Rural y Agua, Josep Puxeu, se avanzó en la elaboración del Programa de Desarrollo Rural Sostenible, con el objetivo de que para el periodo 2010-2014 pueda aplicarse, de acuerdo con la zonificación que establezcan las comunidades autónomas en todo el territorio nacional y, muy especialmente, en las zonas definidas como desfavorecidas.

   Puxeu indicó que confía en que se superen en este ejercicio el centenar de zonas piloto de aplicación (ya se han puesto en marcha 50 proyectos), con una mayor diversificación de las medidas y desarrollándose en todas las comunidades autónomas, donde los índices de población sean inferiores a los 100 habitantes por kilómetro cuadrado, y en las áreas que sufren una mayor despoblación.

   El Ministerio señala que antes del 31 de marzo las comunidades autónomas concretarán las zonas piloto de actuación en 2009, y precisarán, junto a la Administración General del Estado, los escenarios financieros en régimen de concertación al 50%

La DPT propone estrategias contra la despoblación

La Diputación Provincial de Teruel, junto a organizaciones empresariales y sindicales y grupos Leader, ha elaborado un documento con estrategias contra la despoblación que se presentará a la Comisión Europea para su incorporación al Libro Verde sobre Cohesión Territorial. La institución pretende avanzar en nuevas estrategias que frenen la despoblación que sufre la provincia mediante la colaboración entre instituciones y entidades privadas.

En el documento se recogen iniciativas desarrolladas en la provincia como los multiservicios rurales, el Patronato Provincial de Turismo, la explotación de recursos energéticos, la rehabilitación de viviendas municipales destinadas a nuevos pobladores y la negociación de fondos compensatorios. La propuesta incide en la necesidad de crear programas de empleo público, especialmente femenino, así como programas medioambientales y ayudas a vivienda mediante rehabilitación de inmuebles públicos. Asimismo se plantea la necesidad de modelos correctores en la cohesión territorial de la UE que permitan una distribución de la financiación en territorios provinciales, teniendo en cuenta aspectos como la despoblación, el envejecimiento, la ruralidad y la necesidad de atraer a nuevos pobladores. 

Al rescate de los olvidados

Leemos una interesante columna de F. Trespaderne en el Diario de Burgos  que habla sobre la creación de una Asociación de Pueblos Olvidados en la provincia de Burgos. Os la recomendamos:


Aunque con esto de la crisis algunos se están viendo obligados a regresar al pueblo, lo cierto es que la despoblación sigue siendo una asignatura pendiente para esta provincia y región, ya que las medidas adoptadas no han dado los frutos deseados y la lista de pueblos que echan la persiana sigue creciendo año tras año.
Para frenar esa sangría, un grupo de alcaldes ha creado la denominada Asociación de Pueblos Olvidados de Burgos, cuyos estatutos presenta hoy en la Junta de Castilla y León. Lo primero que uno se pregunta es cuántos pueblos olvidados tenemos en esta provincia o sienten que lo están. Hace unos meses publicamos una extensa lista y mucho me temo que alguno más se habrá incorporado desde entonces.
La segunda reflexión es sobre qué serán capaces de hacer los alcaldes de unos pueblos olvidados, no abandonados, que no cuentan mucho para las administraciones y tampoco para los grandes partidos debido a su poco peso electoral. También será interesante conocer las ideas y propuestas que tienen los responsables de esta nueva asociación para sacar del olvido a esas localidades burgalesas que languidecen sin que nadie haga nada, y es que no hay recetas mágicas y menos para mantener abiertos todos los pueblos, que no son pocos, de esta provincia.
Tan olvidados están estas juntas administrativas que no suelen recibir ayudas directas de las administraciones, tienen que pasar por el municipio, como las del Fondo Estatal de Inversión Local o las de planes provinciales y regionales.
No hay inversión en los pueblos olvidados y, lo que es peor, tampoco queda mucha ilusión entre sus vecinos. Tal vez por eso es positivo que se cree esta Asociación de Pueblos Olvidados de Burgos, cuando menos durante unos meses los medios de comunicación hablaremos de estos pueblos, conoceremos el nombre alguno y muchos se preguntarán qué fue del pueblo de sus antepasados. Por un día saldrán del olvido.     

Al rescate del Románico

Reproducimos un artículo de Peridis para El País,

Es evidente que la despoblación de las zonas rurales supone un gran peligro para buena parte de esos 9.000 testimonios de arquitectura románica que, como hitos en el paisaje, se hallan dispersos por el norte de la península y que tanta emoción y disfrute nos proporcionan. Sin embargo, sabemos que esos personajes que, con los ojos abiertos de par en par, nos piden ayuda desde los capiteles de los claustros o las arquivoltas de las portadas, no están haciendo una llamada en vano porque se está produciendo una gran operación de rescate que coincide con el inicio del segundo milenio.

Renombrados escritores han conseguido fama y fortuna interesando por los siglos medievales, más luminosos que oscuros, a millones de lectores. A la divulgación del románico han contribuido también series de televisión y la Enciclopedia del Románico que promueve CajaDuero con la Fundación Santa María la Real. No es de extrañar que se haya generado demanda para convertir al románico español en un importante destino turístico.

Y lo que es más importante: se acaban de restaurar 17 iglesias y entornos en Cantabria por la Fundación Caja Madrid y el Gobierno Regional. La Junta de Castilla y León, con el plan Románico Norte, recupera 54 iglesias y entornos en las montañas palentina y burgalesa a la vez que acomete la restauración de 23 templos en Zamora y otros 35 en Soria con la Fundación Duques de Soria.

El Gobierno de Castilla-La Mancha y las cajas de ahorros de la región acometerán en breve el Plan Marca Media para la restauración de 23 iglesias y entornos en Guadalajara y recientemente la Generalitat de Cataluña y la Caixa firmaron un convenio para restaurar 75 iglesias del románico pirenaico.

Si a ello sumamos las intervenciones de oficio de ayuntamientos, diputaciones y del resto de comunidades autónomas podremos afirmar que hay varios centenares los templos románicos que tienen garantizada de inmediato su recuperación y puesta en valor para todos los amantes de esta maravilla del medievo.

La Asociación Contra la Despoblación recibe numerosas llamadas al día

La Asociación de Municipios contra la Despoblación, que preside el turolense Luis Bricio, alcalde de Aguaviva, recibe una media de 20 llamadas de trabajadores españoles y extranjeros de toda España en demanda de una vivienda y un puesto de trabajo.

   En declaraciones a Europa Press, Bricio comentó que las llamadas se han multiplicado por diez desde que comenzó a notarse en España la crisis global. Sin embargo, avisó de que por ahora los demandantes sólo pueden ser inscritos en una base de datos de la que se sirven los ayuntamientos que forman parte de la asociación, ya que no hay muchas ofertas de vivienda y empleo.

   Aunque hace años el requisito era que el trabajador, fundamentalmente inmigrante, se trasladara a un municipio amenazado de despoblación con toda su familia, a día de hoy no es necesario y pueden presentarse familias con hijos, parejas y, también, ciudadanos solteros en edad de trabajar.

   "No sé cómo va a evolucionar" el medio rural con motivo de la crisis, continuó Bricio, quien añadió que, por ahora, la situación está "estabilizada", puesto que "la gente que está aquí, ¿dónde va a ir?; la que tiene trabajo se queda y la que no, igual está aquí".

Mover Montañas

Os informamos de un proyecto de Cooperación Interterritorial que bajo el nombre Mover Montañas plantea  un foro de reflexión y un espacio donde  los grupos de desarrollo rural en territorios de montaña trabajamos para la defensa y preservación de las zonas de montaña españolas y apostamos por el desarrollo integral de estos espacios en términos de sostenibilidad y cohesión territorial. Recientemente se celebró un congreso en torno a la Montaña española, que contó con un notable eco en la prensa y cuyo resumen en vídeo os dejamos aquí



El enorme potencial turístico y cultural de los 3.000 pueblos abandonados en España

El enorme potencial turístico y cultural de los 3.000 pueblos abandonados en España

Aunque no existe ningún listado oficial de los pueblos abandonados en España, "se podría afirmar, sin temor a equivocarse, que hay entre 2500 y 3000 núcleos en esta situación", explica Maximiliano Herren, responsable de www.pueblosabandonados.org , una web que nació hace un año para recopilar todo tipo de información sobre estos lugares y proyectos de repoblación.

"Visito y recabo datos sobre la situación actual e historia de estas aldeas. Intento crear así una herramienta de consulta para repobladores y curiosos -aclara Herren. También echo un poco de luz sobre los aspectos prácticos que condicionan cualquier proyecto de repoblación, como impuestos, planes urbanísticos, subvenciones y alternativas como la ocupación rural".

Una de las posibilidades que ofrecen esos cerca de tres millares de núcleos despoblados es la de convertirse en destinos turísticos, agrupados en rutas, o como centros de actividades relacionadas con su entorno.

Si bien, como reflexiona el autor de www.pueblosabandonados.org , "salvo contados casos, estas aldeas son absolutamente desconocidas para la mayoría, aún cuando encierran un patrimonio arquitectónico y cultural en muchos casos destacable. Iglesias románicas, ermitas y bellísimos ejemplos de arquitectura popular, podrían perfectamente formar parte de circuitos turístico culturales que diesen a conocer estos maravillosos sitios y llevasen riqueza a sus comarcas".

El Bierzo, la montaña valenciana, la Rioja Alta y, sobre todo, Huesca y Soria, concentran la despoblación
La mayor parte de los focos de despoblación se hallan en áreas de montaña porque allí se combinan malas infraestructuras, inviernos muy crudos y tierras poco aptas para el cultivo. Por ello, encontramos una densidad muy grande de núcleos abandonados en comarcas como El Bierzo (León), la montaña valenciana y La Rioja Alta, pero sin duda Huesca y Soria son las provincias con más pueblos abandonados, sobre todo en el Pirineo y las Tierras Altas, respectivamente.

La mayor parte de los abandonos se produjeron en la segunda mitad del siglo pasado, fundamentalmente en las décadas de los 60 y 70, debido al éxodo masivo del campo hacia las ciudades. En aquellos tiempos el Gobierno emprendió proyectos que aceleraron el proceso de despoblación, como la construcción de presas y los masivos planes de reforestación.

Otras actividades turísticas y culturales alternativas a la repoblación directa relacionadas con estas aldeas serían, como apunta Herren, "la inmersión en idiomas, el naturismo, las colonias de vacaciones, que en los últimos tiempos han demostrado ser proyectos viables".

De hecho, muchos de estos pueblos reúnen todas las condiciones para convertirse también en destinos turísticos si se hiciesen las inversiones necesarias: granjas escuela para aprender bioagricultura, pueblos enteramente ecológicos donde podamos ver aplicadas las últimas tecnologías verdes, museos etnográficos vivos donde sus antiguos vecinos pudieran explicar cómo se vivía antiguamente, buena gastronomía, actividades y naturaleza... 
Muchos pueblos podrían resucitar como granjas escuela para aprender bioagricultura, o como museos etnográficos


Hay, asimismo, quienes ya han emprendido ese viaje de modo permanente. Son los llamados genéricamente neorrurales, grupos de urbanitas más o menos organizados que acceden a las propiedades mediante la compra, la concesión o la ocupación de las tierras y comparten algunos principios como la sostenibilidad, la economía solidaria y la autogestión.

"Si nos atenemos a los resultados -explica Maximiliano Herren-, estos grupos son los únicos que han conseguido repoblar aldeas y habitarlas de forma permanente, por lo tanto yo diría que son, hasta la fecha, la única solución viable al problema. Lamentablemente no cuentan con las ayudas y los apoyos necesarios por parte de los gobiernos. Lakabe, en Navarra, Aineto, Artosilla, Ibort, en Huesca, y Matavenero, en León son algunos ejemplos de ecoaldeas hoy consolidadas, que surgieron en los años 80 mediante la ocupación de un pueblo abandonado".
 

Pueblos fantasma

Leemos en laverdad.es  un artículo sobre la provincia de Albacete cuenta con catorce núcleos de población deshabitados Otras 17 localidades albaceteñas tienen tres habitantes o menos empadronados

Si en Estados Unidos fue el fin de la fiebre del oro la que propició que muchos pueblos nacidos alrededor del amarillo metal, quedaran abandonados, en nuestra provincia la mecanización del campo y la búsqueda de un futuro más próspero en la ciudad, han provocado la aparición de los denominados pueblos fantasma.

La provincia de Albacete cuenta con un total de 317 núcleos de población diferenciados, de los cuáles, según los datos contenidos en el Nomenclator del Instituto Nacional de Estadística (INE), catorce se encuentran totalmente deshabitados, ya que en 2007 no tuvieron ningún habitante registrado.

Aunque catorce no es un número muy significativo, lo cierto es que en los próximos años esta cifra podría crecer de forma considerable, ya que existen otras diecisiete localidades con tres habitantes o menos y decenas de aldeas, que cuentan con quince habitantes o menos. Cabe destacar que sólo en Yeste existen 14 poblaciones de estas características.

Deshabitados

A la hora de encontrar los denominados pueblos fantasma, no existe ningún criterio geográfico, ya que las aldeas que han quedado deshabitadas, se encuentran repartidas por todos los rincones de la provincia, tanto cerca como lejos de la capital y tanto en la sierra, como en la llanura.

En concreto los núcleos de población que a día de hoy no cuentan con ningún habitante son: Urbanización Santa Clara, en Albacete capital; Marimínguez, en Alcalá del Júcar; Los Vizcaínos, en Bogarra; Sotuélamos, en El Bonillo; Casa Ideas, Casa Nueva del Cuartico, Casilla de Abajo, Casilla de Arriba y Oncebreros en La Herrera; Tabaqueros, en Villamalea y Los Pifanios, Pollo de Abajo, Semilla de Abajo y Venta del Tabaquero, en Villaverde de Guadalimar.

De todos ellos, sin duda el que más fama llegó a tener fue Sotuélamos, que aunque actualmente no tiene ningún habitante, mantiene una cierta actividad gracias a la fábrica de quesos Vega Sotuélamos y el coto de caza, que atrae a muchos visitantes.

La última familia en dejar Sotuélamos, fue la de Ángeles Toledo Carlos, debido a la enfermedad de su marido, que no les permitía quedarse en una localidad, sin ningún tipo de servicio sanitario.

Se marcharon a Munera hace cuatro años, pero han vivido allí durante medio siglo. «Cuando yo era joven -comenta Ángeles- vivían en el pueblo cerca de 150 personas. Hace 50 años era cuando más gente vivía allí, cuando estaban los antiguos amos».

El antiguo amo, era el mismísimo Serrano Suñer (el cuñadísimo), seis veces ministro del Gobierno de Franco, en los primeros años de la dictadura, como nos comenta Víctor Parreño Jareño, trabajador de la fábrica de quesos desde hace dos décadas.

«Él -explica- era el dueño de la finca, trajo trabajo al pueblo, porque trajo la serrería, también se montó el cuartel de la Guardia Civil y el pueblo tenía su colegio y su iglesia. En su día Sotuélamos era más importante que Munera y El Bonillo».

El declive llegó con la venta de la finca, como recuerda Ángeles. «Los amos viejos vendieron aquello y se partió en parcelas y la gente se vino a los pueblos. Se fueron a Munera y El Bonillo y para trabajar la tierra iban y venían. Así empezó a desaparecer el pueblo».

Despoblación

La despoblación fue progresiva, como comenta Víctor Parreño. «Cuando yo llegué a la fábrica hace 20 años, aquí sólo vivían de continuo cuatro familias, más la gente que vino a trabajar al campo, que era bastante. Además Sotuélamos tenía piscina, cuando ni Munera, ni El Bonillo, ni Villarrobledo tenían, por lo que en verano había mucho ambiente».

Carmen Vecina es hija de Ángeles Toledo y se ha criado en Sotuélamos. «Aunque cerró hace 38 años, yo llegué a ir al colegio allí, pero sólo hasta los cinco años, luego nos mandaron a El Bonillo y después a Munera, aunque seguimos viviendo en el pueblo. Con el desvío de la carretera y el cierre de la piscina decayó mucho. Nosotros seguimos yendo, aunque con la enfermedad de mi padre es complicado. Ahora ya no va casi nadie, hay dos o tres vecinos que van de vez en cuando».

Por su parte, Ángeles que ha vivido en el pueblo media vida, no puede evitar añorarlo. «Nada más casarme me fui a la aldea y aunque ha cambiado mucho y las casas se están hundiendo, la echo de menos».

Abandono total

Aunque Sotuélamos no tiene habitantes, sigue vivo gracias a la gente que trabaja allí a diario y a los cazadores que visitan la zona, existen otras aldeas cuyo abandono es total, es el caso de varios pequeños núcleos poblacionales, que existen en la localidad de La Herrera.

Oncebreros, Casilla de Abajo, Casa Nueva del Cuartico y Casa Ideas son pequeñas poblaciones que crecieron en torno a una finca y que estaban habitadas por los trabajadores de las mismas, razón por la que la población siempre ha sido mínima.

Marceliano Martínez de la Vara, ha sido panadero en La Herrera durante muchos años y ha llevado el pan a todos estos lugares. «Yo iba a todas esas aldeas, que tenían muy poca población. Había una o dos familias por pueblo, la que más gente tenía era la Casilla de Arriba. Pero ahora todas están deshabitadas, incluso en verano».

Como comenta Marceliano, la despoblación de estas aldeas ha sido forzosa. «Las aldeas han quedado vacías, porque han terminado muriendo. Alguno de los amos va a labrar de vez en cuando, pero está cuatro días y se va».

Peligro de extinción

Aunque ninguna de estas pequeñas aldeas tiene habitantes, La Casilla de Arriba tiene algo de actividad, ya que los propietarios de la finca pasan el verano allí y cuentan con un trabajador, Ignacio Aroca, que va todos los días a trabajar la tierra. «Esta es la única aldea que tiene actividad ya. El dueño viene de vez en cuando y a diario estoy yo y también viene un jardinero».

Sin embargo, hace mucho que nadie vive allí. «Yo entré a trabajar aquí hace 34 años y entonces vivían aquí dos familias, la del tractorista y la del rentero, que era un labrador que llevaba las tierras y daba las rentas a los dueños, pero se fueron hace 18 ó 20 años, porque ahora con un tractor lo labras todo. Además de las poblaciones que no tienen ningún habitante, en la provincia existen muchas, que podríamos decir que se encuentran en peligro de extinción, ya que cuentan con tres habitantes o menos.

En concreto hablamos de: Urbanización El Peñascal, en Albacete capital; Fuente del Pino, en Alcadozo; El Griego, en Ayna; Puerto del Pino, en Elche de la Sierra; La Grajuela, en La Gineta, Vandelaras de Abajo, en Lezuza; Talave, en Liétor; Cilleruelo y Peñarrubia, en Masegoso; El Sahúco, en Peñas de San Pedro, La Casica, en Pozuelo; Riópar Viejo, en Riópar; Cuevas del Molino de las dos Piedras, en San Pedro, Parideras, en Vianos; Los Cárceles, en Villamalea y Casa de la Peña y Venta de Alcolea en Villarrobledo.

La Grajuela esta poblada solamente por dos familias y la razón por la que quedan tan pocos vecinos, es según uno de sus moradores, Diego Almendro Ballesteros, la maquinaria. «La culpa de que la gente se marchara, la tiene la maquinaria, porque como fue evolucionando, se necesitaban menos personas para trabajar».

Como ha sucedido en otros muchos sitios, la marcha no fue repentina, sino que se produjo de forma progresiva.

«Antiguamente, aquí vivían de continuo 15 ó 20 familias, pero hace 8 ó 10 años, sólo quedaban cuatro y ahora estamos sólo dos, una aquí y otra en la Casa del Conde, a 500 metros», explica.

Aunque pasan mucho tiempo en La Gineta, que está a tiro de piedra, lo cierto es que se han planteado en más de una ocasión abandonar La Grajuela. «Lo hemos pensado en alguna ocasión por los hijos, porque hay que llevarlos al colegio y tenemos que estar siempre pendientes de sus necesidades».

Sin embargo, continúan viviendo en la pequeña aldea, en la que a veces echan de menos a la gente. «Tenemos una tranquilidad impagable, aunque a veces pagaríamos por no tener tanta».

Por suerte para ellos, los ritos religiosos llevan a los vecinos de La Gineta en romería a la ermita de la aldea, en más de una ocasión al año, por lo que reciben visitas muy numerosas.

La Diputación provincia del Zamora ha entregado un total de 86 ayudas a la natalidad por valor de 61.900 €

La Diputación provincia del Zamora ha entregado un total de 86 ayudas a la natalidad por valor de 61.900 €

Podemos leer en Zamora Digital

La Diputación de Zamora ha hecho entrega esta mañana de 86 cheques de ayudas por nacimiento en localidades de la provincia menores de 1000 habitantes que suman una cuantía de 61.900 € en distintas cantidades que varían desde los 1.000 € hasta los 300 €, según aspectos como nivel de renta u otras variables.

Estas ayudas tienen como objetivo incentivar los nacimientos y adopcion3es en le medio rural con el fin de paliar el elevado índice de despoblación que sufren los pequeños municipios. Las 86 ayudas concedidas son las aceptadas hasta la fecha, pero hay que señalar que el plazo para poder optar a ellas sigue abierto hasta finales de este año.Hay que señalar que 50 de los beneficiarios de estas ayudas corresponden a nacimientos en localidades de entre 250 a 500 habitantes lo que indica que se concentran en las poblaciones de menor población de la provincia, tal y como señaló el presidente de la Diputación, Fernando Martínez Maillo que fue el encargado de entregar esta mañana en el patio central de la Diputación los cheques a los padres que han obtenido la citada ayuda.

Hay que recordar que una de las exigencias de las bases que regulan la ayuda a la natalidad es que  estén empadronados y residan en la localidad antes del 1 de enero de 2007 y que en el caso de extranjeros, al menos uno de los progenitores debe cumplir las condiciones de empadronamiento que figuran en la ley orgánica 4/2000.

La pretación concedida por la Diputación consiste en una ayuda económica de hasta 1.000 € que es la cuantía máxima establecida. Un baremo que tiene en cuenta aspectos como el nivel de renta, si es parto múltiple o adopción simultánea, el número de habitantes del municipio etc… es el que determina la cuantía final de la ayuda que, es totalmente compatible con otras que otorguen cualquiera de las administraciones públicas.

El número de núcleos de población beneficiados por esta prestación es de 485 que suman una población de 84.275 habitantes. Asimismo, hay que destacar que las ayudas con cantidades superiores a 800 € han concentrado, hasta ahora, más de la mitad de los 86 cheques entregados.

Tal y como destacó el presidente de la Diputación en su intervención de esta mañana, uno de los ejes fundamentales sobre los que trabaja la institución provincial es tratar de equiparar en medios y servicios a los pequeños municipios con las capitales de provincia con el ánimo de frenar la despoblación y dotar de una mejor calidad de vida a las personas que viven en los pueblos. En esta línea, se han puesto en marcha 25  guarderías para niños de 0 a 3 años, ayudando así a  la conciliación de la vida familiar y laboral y está previsto que pronto se pueda contar con 30 comedores sociales para los mayores del medio rural. (En este momento hay 16 en funcionamiento y 14 en obras). Las ayudas económicas a la natalidad  vienen a completar este conjunto de prestaciones sociales que tratan de fijar población en nuestros pueblos.

El año en que Somiedo renació

El año en que Somiedo renació
El Parque Natural cumplió ayer veinte años. Su declaración permitió al concejo salir de su aislamiento y convertirse en un referente en desarrollo rural y gestión ambiental
11.06.08 -
Hubo un tiempo en que para acudir a Saliencia había que torturarse los pies en una larga y empinada caminata por un estrecho camino, embarrado y peligroso. Eran épocas en las que los burros y los bueyes eran casi el único medio de locomoción para acceder a las brañas somedanas. No hay que remontarse tantos años para revivir aquellas imágenes. Basta con echar la mirada atrás veinte años. Pero hubo un momento en que todo cambió. Un punto de inflexión que permitió al concejo somedano dejar el siglo XIX para entrar de lleno en el XXI en sólo dos décadas. ¿El culpable? La declaración del municipio como Parque Natural.
El 10 de junio de 1988 forma ya parte de la historia del municipio, cuyas huellas de los primeros pobladores se pierden en la oscuridad de los tiempos. Aquel día, el Principado aprobó una declaración que creaba en el municipio el primer espacio de estas características de la región. Con él vinieron fuertes inversiones, ligadas a un modelo ejemplar de gestión ambiental, que ha permitido transformar un concejo eminentemente rural en un referente nacional en turismo y gestión ambiental.
En estos veinte años Somiedo ha hecho los deberes. Y con nota. Según el último informe de indicadores económicos elaborado por el Indurot, la media actual de renta per cápita del concejo es de 10.000 euros (11.000 es la regional), lo que le convierte en el concejo número 48 de Asturias con mayor renta. Hace veinte años ocupaba el último eslabón de desarrollo. Ocho años después de la declaración del parque, escaló hasta el puesto 73.
Arca de Noé
Somiedo es el ejemplo a seguir. Es una especie de arca de Noé para todos aquellos municipios rurales y de montaña de España que luchan por salvarse del diluvio de la despoblación. ¿Su secreto? El modelo de desarrollo puesto en marcha con la declaración del parque y la gestión de las inversiones llevadas a cabo dentro de los diferentes planes rectores de uso y gestión (PRUG) del espacio iniciado en estas dos décadas. Todo un modelo que tiene como base sus actividades tradicionales y su capacidad para la diversificación. Y es que, al igual que en 1988, el sector primario es el que marca el latir de Somiedo.
La ganadería sigue siendo hoy el principal motor económico. Hace veinte años se contabilizaban en el concejo 350 explotaciones, con una media de doce vacas por cada una. Hoy hay más de doscientas, pero el número de cabezas por explotación se eleva hasta las 45. En total, en Somiedo pastan en sus majadas 7.000 vacas, a las que se suman los rebaños de ovejas y cabras. El sector ganadero genera trescientos de los quinientos empleos existentes en el municipio.
Pero, sin duda, la clave del milagro es la apuesta del sector terciario, el de los servicios. Las mejoras en las infraestructuras y equipamientos han convertido al municipio en uno de los más dinámicos del Principado.
Turismo
Gracias, en gran parte, al tirón turístico. En 1988, apenas un par de fondas estaban abiertas. Hoy, hay más de ochenta establecimientos hoteleros, que en total superan las 1.200 plazas de alojamiento. A ellas, se añaden las cuatrocientas de camping. Todo este modelo de desarrollo ha tenido sus consecuencias positivas no sólo en la mejora de las rentas de los habitantes y en su bienestar, sino en la propia supervivencia del concejo. Un trabajo intenso llevado a cabo durante veinte años que ha permitido al municipio hacer frente a la despoblación.
En comparación con otros concejos de montaña, la población actual de Somiedo -1.600 habitantes- se mantiene casi idéntica a la década de los ochenta, que era de unos 1.800. Además, su capital, Pola, es la única de Asturias de menos de 500 habitantes que no sólo no ha perdido población en la última década, sino que la ha incrementado. Incluso en las brañas y pequeñas aldeas la tendencia es a la de estabilización demográfica. Todo un milagro.
Población concienciada
El alcalde somedano, Belarmino Fernández Fervienza, considera que una de las claves del despegue somedano está, al margen de su declaración como Parque Natural, en la implicación de los vecinos en el modelo de desarrollo y gestión ambiental del municipio. «Los incendios forestales son hoy casi inexistentes; el oso se recupera, cuando hace veinte años los matábamos. Los vecinos entienden que nuestra riqueza medioambiental es nuestro futuro», explica.
El regidor considera que lo hecho en Somiedo en estas dos últimas décadas es un ejemplo a seguir en otras zonas de España. «Hemos demostrado que se puede crecer compatibilizando conservación con desarrollo», añade.
Somiedo celebrará mañana por todo lo alto su renacer. El Ayuntamiento ha organizado un acto institucional para recordar la declaración del Parque Natural en la que estará presente, entre otros, el presidente del Principado, Vicente Álvarez Areces.

La Diputación de Teruel aprueba ayudas para intentar luchar contra la despoblación en municipios de la provincia

La Diputación Provincial de Teruel (DPT) aprobó hoy en sesión plenaria la puesta en marcha de un convenio de colaboración con el Gobierno de Aragón que permitirá a determinados ayuntamientos de la provincia acceder a una serie de subvenciones ayudas que podrán utilizar para luchar contra la despoblación.

   En concreto, se trata de una línea de ayudas destinadas a "la rehabilitación de viviendas de titularidad municipal para la utilización por nuevos pobladores", explicó el vicepresidente de la DPT, Inocencio Martínez, quien añadió que "nuevos pobladores son en este caso, jóvenes autóctonos emancipados, inmigrantes y personas procedentes de otros lugares".

   Las subvenciones irán destinadas a municipios de menos de 500 habitantes. En cuanto a las ayudas, la cantidad máxima subvencionable es de 27.500 euros por vivienda rehabilitada. Además, Martínez explicó que en el caso de los municipios de menos de 100 habitantes las ayudas serán de hasta el 90 por ciento; en localidades de menos entre 101 y 250 habitantes será del 80 por ciento; y en el caso de pueblos de entre 251 y 500 habitantes del 70 por ciento.

   El Gobierno de Aragón aportará hasta el 40 por ciento de los gastos de rehabilitación, con un máximo por subvención de 11.000 euros, mientras que la DPT aportará el resto, hasta un máximo de 13.750 euros.

   Por su parte, el portavoz del Partido Popular (PP) en la Diputación, Luis Carlos Marquesán destacó que "debemos analizar las circunstancias en las que se desarrolle porque se ha puesto el límite en 500 habitantes, cuando la realidad de la provincia es que proliferan las localidades de menos de 1.000 habitantes". Así que aseguró "que no hay mucha diferencia entre un municipio de 400 habitantes y otro de 600, en cuanto a posibilidades económicas y desarrollo".

   Por eso, manifestó que "esa línea de corte puede generar ciertas injusticias y algunas discriminaciones que debemos estudiar en el futuro", al tiempo que apuntó que "debemos velar porque sea en todos los municipios igual".